En la siguiente columna, la presidenta de Wikimedia Chile, Rocío Consales, reflexiona acerca del último encuentro mundial de voluntarios Wikimedia, que tuvo lugar en Estocolmo, Suecia, y cómo estas reuniones nos demuestra la importancia de la colaboración para crear y compartir conocimiento.
Este año, en el mes de agosto, se realizó una nueva versión de la reunión internacional que congrega a wikimedistas de todo el globo. En esta ocasión centrada en la sostenibilidad y en lo que queremos ser como Movimiento con miras hacia el futuro próximo.
Las Wikimanías son experiencias únicas que nos demuestran que no estamos solas luchando por el conocimiento libre, es la instancia donde puedes impregnarte de todo el entusiasmo y la esperanza que aún quedan para seguir avanzando, aportando nuestro granito de arena, en construir el mundo que deseamos: abierto, inclusivo, basado en la cooperación mutua.
Ser voluntaria en los proyectos de Wikimedia es una experiencia que enriquece como persona, que nos saca de nuestro egoísmo diario y nos permite compartir de una forma tan simple, pero arraigada en la historia, la construcción de nuestro conocimiento común como humanidad. Suenan como palabras al viento, grandilocuentes, de buena crianza, pero no. Ser wikimedista es hacer por la humanidad la recolección vital de lo que somos, es ser investigadora constante y consiente –como personas y humanidad- de lo que construimos socialmente, sea para bien o para mal. Dejar el registro, vital, para conocer y conocernos, entender los procesos sociales, biológicos, y todo lo que acontece a nuestro alrededor, no solo editando artículos, sino compartiendo conocimiento –desinteresadamente, diríamos, de una forma idealizada-, imágenes, documentos, finalmente… compartiendo nuestro tiempo, el único recurso gratuito que todos poseemos, el más escaso, hermoso y no renovable. ¿Hay una razón mayor para perder el tiempo? ¿Existe una razón mejor?
Este año asistí a muchas charlas diversas, escuché las historias de personas que se desviven por apoyar, reunir y aunar comunidades para rescatar conocimientos, lenguas, ideas. En su gran mayoría, organizaciones que no poseen casi financiamiento, pero que trabajan con la esperanza de que hacen algo más grande que ellas mismas. La mayor parte, personas voluntarias, involucradas, pensantes y críticas, que quieren formar comunidades unidas y diversas, conexiones constantes con el conocimiento y su difusión.
Me centré en asistir a las conferencias relativas a la retención de usuarias y usuarios. En ellas entendí que la única manera de lograr que las personas pasen de “asistir a una editatón” a “quedarse participando” es generar un vínculo real, construir comunidades sólidas que no solo se junten a editar, sino que compartan, dialoguen, discutan, se sumerjan y entiendan que son parte de un grupo enorme de personas que queremos compartir conocimiento y, de forma fundamental, lograr que se sientan orgullosas de ello, de su trabajo, de su tiempo invertido, aceptando y entendiendo los obstáculos y desafíos que significa trabajar con un universo tan diverso de personas.
Wikipedia es un reflejo de la sociedad, si queremos mejorarla, podemos hacer que este reflejo represente todo lo que somos y estamos haciendo, todo lo que realmente es relevante para entendernos y vernos como humanidad que convive en relativa armonía, que se ve a sí misma de forma crítica e intenta conseguir una objetividad que, a pesar de ser solo un ideal, nos une y nos permite llegar a consensos, acuerdos y, finalmente, comunicarnos y comprendernos.
Rocío Consales
Presidenta
Wikimedia Chile